Clausura y decomiso de licor en Huaquillas, más retiro de una treintena de libadores en Bajo Alto (El Guabo) fueron los resultados de los operativos de control del orden público que pos disposición del gobernador de El Oro, Danny Gámez, ejecutaron los comisarios nacionales en ambas jurisdicciones.

Huaquillas: Clausura
El comisario nacional de Huaquillas, Aníbal Tandazo reportó que ciudadanos de la lotización Los Ángeles denunciaron la presencia de varias personas en un local donde se presumía venta y consumo de licor mientras los concurrentes jugaban billar.

“Junto con la jefa política, Irina Alvarado y con miembros de la Policía Nacional del Ecuador fuimos a inspeccionar el sitio y encontramos que siete personas estaban jugando billar; eso fue motivo suficiente para dar ciertas las denuncias recibidas”, indicó Tandazo.

Causales
Dijo que luego de retirar a los jugadores se dialogó con los administradores del negocio, explicándoles que esa actividad estaba prohibida por el momento; puesto que el Comité de Operaciones de Emergencia, COE, Cantonal de Huaquillas, no había autorizado la apertura de centros de diversión como medida para prevenir la expansión del coronavirus.

“Además, les hicimos conocer que se infringían lo que establece el Artículo 21 Numeral 3 y el Artículo 23 numeral 1 del Acuerdo Ministerial 0069; es decir, expender y/o permitir el consumo de bebidas alcohólicas y no contar con el Permiso Anual de Funcionamiento; tras esto, decomisamos 6 jabas de cerveza y procedimos a clausurar el local”, aseveró el comisario nacional

Bajo Alto (El Guabo): Retiro de libadores
Mientras tanto, la noche del sábado 3 de octubre, Roger Pineda Mejía, comisario nacional de El Guabo, se dirigió junto los efectivos de la Policía Nacional del Ecuador hacia el balneario Bajo Alto, ya que horas antes recibió denuncias sobre aglomeraciones en los espacios públicos por parte de personas que se encontraban libando.

“El problema en Bajo Alto es el alto índice de consumo de alcohol por ciudadanos que usan el malecón y otras zonas comunes para convertirlos en bebederos, lo cual está prohibido y peor si no hay distanciamiento social ni uso de mascarilla”, manifestó el comisario Pineda. A las 23h00, la autoridad cantonal y los agentes policiales llegaron a la playa mencionada y se toparon con grupos de personas que libaban copiosamente sin el menor reparo ni protección de bioseguridad.

Pero eso no fue todo; pues, según Pineda, también pudo verificar que algunos establecimientos de comida seguían funcionando; pese a que entre las resoluciones del COE Cantonal de El Guabo, se establece que el horario de funcionamiento culmina una hora antes de la medianoche.

Controles
“Nos pusimos manos a la obra y fuimos de grupo en grupo exigiéndoles que se pusieran el cubreboca; después, les hicimos conocer que estaban actuando en contravención de la normativa y que estaban exponiéndose y exponiendo a los demás a un potencial contagio del virus y los invitamos a que se retiren cuanto antes a sus domicilios. En total 37 libadores fueron expulsados de las áreas colectivas”, mencionó el comisario nacional.

Añadió que una vez libre de bebedores de licor en la vía pública, les tocó visitar a los restaurantes que ya cerca de la una de la mañana del día siguiente, aún continuaban con sus puertas abiertas.

“Hablamos con los dueños y los hicimos cerrar de inmediato, el balneario quedó en paz; sin embargo, este tipo de conducta por parte de propios y afuereños está tan arraigada que se ha vuelto recurrente. Estamos coordinando con la Municipalidad de El Guabo para enfrentar de manera más drástica este tipo de problema”, enfatizó el comisario Pineda.